domingo, 11 de enero de 2009


Tengo muchos sueños por cumplir, y tiempo no lo se. Lo que se es que las metas suben un día, pero la realidad se empeña en dar tortazos a todo el que encuentra a su paso. A Realidad deberiamos de cogerla todos un día y decirle cuatro cosas, no puede seguir así. Ella se dedica a destrozar muchas ilusiones, y muchas de estas ilusiones mueren inmediatamente, a no ser que Personalidad sea una mujer fuerte, y entonces te empuje a enfrentarte a Realidad. Pero nadie le dice a Realidad lo que debería escuchar... y deberiamos de hacerlo, porque sin darse cuenta, a los soñadores, nos rompe el corazón. Hoy, soy capaz de decirle lo que pienso, si me la encontrara por la calle... tendría su merecido. Aunque eso sí, tengo dos pedacitos de realidad... que me ilusionan... por contradictorio que suene después de la parrafada... Pero ellas, ellas son una dulce realidad, y aunque parezca mentira, me arrancaron, de raiz, de un mundo de ilusiones que no era precisamente un campo de amapolas. Ellas si que son una ilusión. Y sus sonrisas, mucho más.

1 comentario:

Silvia Muñoz dijo...

Ocurre que Realidad el día que menos te lo esperas te sorprende y te trae una rotunda emoción, un hermoso deseo, una meta cumplida, una sonrisa del alguien a quien quieres y que además (Oh Dios!!!) te quiere. Realidad no es una destroza-sueños...es alguien que intenta sobrevivir en esta puta jungla...y lo hace lo mejor que puede, lo mejor que sabe...Convivir con Realidad no es tan difícil...y desde luego no es tan malo...dale una oportunidad. Ah...y por Dios que nadie destroce tus sueños pero igual no es tan malo que despierten, no???

P.D: Aquí, a este lado, en el bando de los de Realidad te esperamos todas...las dos ilusiones, y las que te queremos...así, sin más. Siempre Juntas. Besos